Jueves 21 de Noviembre de 2024

12/12/2020

Regionales

ENTREVISTA

“Patita” Cabrera un profesor de ayer y hoy

Patricio Guzmán

Redactor de Tercer Tiempo Noa

Tucumán es tierra generosa desde la docencia deportiva en materia ovalada. Con un profesor Mario Santamarina como pionero y señero desde sus enseñanzas rugbísticas y con postas que dejó para que otros colegas tomen el guante desde la continuidad apasionada por enseñar y a la vez educar. En Tercer Tiempo Noa tenemos el privilegio de contar la historia de un docente que hizo y hace de su profesión un culto y de sus resultados, su chapa de presentación, Domingo Emilio Cabrera, o mejor dicho, “Patita” Cabrera. Profesor de Educación Física de Nicolás Sánchez, Matías Orlando y Domingo Miotti.


El Señor de los deportes

“Como casi todos los chicos arranqué jugando al fútbol en un baldío de mí barrio, muy cerca del Hospital de Niños. Allí la redonda era la que nos citaba como el deporte inicial y que me fue dando la posibilidad de hacer amigos, entre ellos mí compadre “Coco” Terraf. Luego paso a jugar al club Tucumán Central, pero a mis once años un amigo Giovani Pasteri que era casero de Natación y Gimnasia me lleva al club blanco y con tan solo un entrenamiento debuté en el rugby”- recuerda.

Cabrera es un multifacético en su currículum como deportista. A mismo tiempo que pasaba tardes entre pelotas redondas y ovaladas, jugaba al básquet: “No era buen jugador de básquet, pero me apasionaba y lo practicaba igual” – afirma. También vistió la camiseta de Argentinos del Norte en el primer Campeonato Argentino Juvenil de Fútbol que organizaba Coca Cola y separados tan solo por un alambrado se cruzaba hacía Natación para seguir tackleando y haciendo amigos. Jugó de full back y llegó a vestirse de Naranja tanto en juveniles como en la selección mayor. “Me olvidé de aclararte algo, a mí compadre “Coco” Terraf lo llevo a jugar al rugby y luego llegó a ser jugador, entrenador y luego presidente de Natación” –expresa con orgullo.


De jugador a entrenador

- Cómo nace la pasión por entrenar deportistas?

- Al recibirme en el profesorado y teniendo una acabada idea de la preparación física de los deportes que practiqué, todo se hizo más accesible. En Juveniles con el “Mocho” Gabriel Palou como entrenador comienzo haciendo la parte física de una juvenil de Natación, así fui dándole una identidad a mí trabajo con bases claras. Hacía tanto trabajo de campo grupal, como individual. Nunca olvidaré que Palou fue quién me impuso como preparador físico de la primera división. Me tocó entrenaron la primera de Natación que contaba tan solo con 17 jugadores y solo tuvimos un lesionado.


Algunos de sus atletas

“Patita” es un mar de emociones. Su voz ronca se mezcla con sus recuerdos de arengas a figuras de la talla de Julio Coria, Omar Hasan y Pablo Garretón, es parte de la velocidad que Martín Terán le dio al rugby y al fútbol, como de la fortaleza que empujaba las humanidades de Pablo de Lucca, Diego Vidal, el Ruso Allori, el “Chancho” Lagarrigue. Fue clave en las vidas deportivas de Julio Williams, de un tal “Gaucho” Perondi y su potencia al patear, como del quirúrgico “Manino” Mentz. Cabrera es agradecido y sonríe al nombrar a Lucas Ferro y lanza una carcajada cuando se le pregunta si se lo hacía reír el “Orejón” Álvaro López González, por recordar algunos de los tantos que sudaron la gota gorda bajo su mando. Hoy, su vigencia y excelencia lo hace ser entrenador personal de tres pumas indiscutidos, “Cachorro” Sánchez, “Tostao” Orlando y “Mingo” Miotti. Todo un orgullo para sus honores.


- ¿Qué mensaje le gustaría dejarles a los deportistas que confiaron y aún confían en tu trabajo?

- (Su voz se quiebra) Solo agradecerles justamente la confianza. Decirles que les di y les doy todo mi corazón a la hora de hacer mi trabajo.


- ¿Quién es usted, “Patita” Cabrera?


- Un hombre con un único vicio, mis amigos. Siempre que puedo ayudo a mis deportistas que hizo y hace de su trabajo una pasión sería y que tiene sueños aún por cumplir como entrenar Los Pumas. Sigo soñando como cuando era niño.



Recomienda esta nota: